viernes, 4 de noviembre de 2016

Libro Contando con tu Alma (Eric Rolf) Capitulo-1



CREATIVIDAD- Capitulo1 (NUMERO-1)
Los 9 números se configuran en tres triángulos ascendentes. 
El primer triángulo es el YO, el segundo representa la ENTREGA, y el tercero conduce al DESAPEGO. 
En el primer triángulo el 1 representa el YO exterior, el 2 el YO interior, y 3 el puente entre ambos. 
“El 1 viene de la Unidad, que es una forma de decir que antes del uno está el Todo o la Nada. 
Es como si tuviera a Dios detrás, que le anima y le da el impulso para empezar a andar sus primeros pasos. 
Parte de su camino es separarse de ese Todo, ponerse por su cuenta y, para distinguirse, se reafirma en el YO, lo que le hace muy sensible a su ego. 
Es externo y protagonista, actúa por instinto primario, atraído por la novedad, con la ingenuidad y la inocencia de ser un hijo de Dios.” 
El 1 es el primer número que llega, el 9 es el último. 
El 1 viene del Todo y el 9 va a la Nada, el Todo y la Nada son distintas manifestaciones de lo Mismo, son la primera división mental en los dos extremos. 
El 1 viene del mismo sitio donde va el 9; el 1 lo ve como el Todo y el 9 como la Nada. Para el 1 es el Todo porque justo acaba de estar ahí y su última experiencia ha sido ese contacto pleno con la Totalidad; se desprende de Ella para andar por su cuenta, a eso ha venido. 
Con el 1 empezamos la función, el público nos está esperando, llegamos al escenario y se levanta el telón. 
Somos los protagonistas y queremos hacerlo muy bien. 
Por eso nos afecta mucho la crítica de nuestro público: “¿les gustará? ¿qué dirán? ¿qué pensarán?” y peor “¡que pensarán y no dirán!”. 
Como estamos muy enfocados al exterior, nuestro ego es muy sensible. Nos encanta el protagonismo y para eso nada mejor que ser artistas, interpretamos bien cualquier papel. 
Si nos lo proponemos podemos ser, incluso, buenos mentirosos. Un actor, por mucho que grite, llore o ría, sabe que está actuando; por un lado, se entrega con pasión y, por otro, sabe que el personaje no es de verdad, que está interpretando un papel. 
Los 1 venimos muy unidos a la Totalidad y por este motivo, no tendremos al principio una individualidad muy definida. Vamos a darle fuerza a nuestra personalidad desarrollando el ego. 
Llegamos sintiendo que formamos parte de un gran conjunto y poco a poco nos queremos separar de él para ser más nosotros mismos. Por eso queremos resaltar: lo que estamos buscando es esa identidad propia y vamos a crearla a nuestra medida para sentirnos separados de ese Todo. 
Para desarrollar el ego, nos gusta ser los primeros y llamar la atención de alguna manera. 
Queremos destacar y lo vamos a conseguir de una forma o de otra; vamos a ser los mejores o los peores, no importa, lo importante es ser únicos. Si no conseguimos ser el mejor ni el peor, por lo menos seremos especiales y haremos alguna cosa fuera de lo común. 
Nos atrae lo nuevo, nos gusta empezar cosas. 
Somos muy impulsivos y si nos permitimos seguir nuestros impulsos, somos muy creativos. 
Tenemos la habilidad de actuar con creatividad en cualquier mundo, porque tenemos una conexión directa con la energía creativa del Universo. Ser creativo es dejar entrar lo nuevo. Para que entre lo nuevo debemos dejar salir lo viejo, que es el pasado. Con un impulso somos capaces de crear un mundo, pero también de destruirlo. 
Nos gusta lo muy nuevo o lo muy viejo, lo de ayer o no nos interesa o nos molesta. Por ejemplo, no hay conflicto entre nuestras ideas y las de los romanos, han pasado veinte siglos, pero si puede haber conflicto entre nuestras ideas y las de nuestros padres. 
La vida es nueva a cada instante y una de las formas prácticas de sentirlo es seguir nuestro impulso, que es también nuevo en cada instante. Seguir nuestros impulsos es como empezar algo nuevo en cada momento. 
Los impulsos vienen del corazón y son también nuestra forma de dar. 
Si nos resistimos al impulso de dar es porque nos paramos a pensarlo; este “parar a pensar” interrumpe nuestra creatividad, el “parar” se convierte en parálisis, nos bloqueamos. 
Podemos ver nuestra vida como la metáfora de acabar de llegar a algún lugar desconocido. 
Es lógico que nos falte confianza porque no tenemos ninguna experiencia ese nuevo lugar. La confianza no es algo que se puede alcanzar directamente, es una consecuencia. 
No se puede hacer nada para tener confianza; hay que correr un riesgo, lanzarse y esperar a ver qué pasa. 
Arriesgarse es mirar a lo desconocido de frente. 
Después de dar un paso hacia lo desconocido y obtener un resultado agradable, surge una especie de confianza. 
Por ejemplo, cruzar la calle; sólo después que la hemos cruzado varias veces, nos sentimos más seguros. 
El peligro sigue estando ahí, pero ahora lo vemos diferente, con más confianza. Somos personas que parece que no envejecemos ni cuando maduramos. Somos niños eternos y nos gusta mirar al mundo como nuestro juguete. 
Nunca perdemos esa parte inocente, de ilusión y esperanza, que tienen los niños. Somos todo corazón, muy impulsivos, nos enamoramos de algo y nos parece que va a ser para toda la vida, pero a la semana siguiente nos enamoramos de otra cosa. Si el impulso nos sale del corazón, nos sobra amor para hacer de madre de todos. Cuando nos dejamos llevar por el corazón, podemos superar cualquier nivel de inteligencia mental, porque ésta es racional, por tanto limitada, en cambio el corazón no tiene límite y puede ir mucho más lejos. 
Cuando no queremos hacer algo que hay que hacer, le preguntamos a otra persona lo que deberíamos hacer. 
Como nosotros nunca hacemos lo que nos dicen, asunto arreglado, ya tenemos excusa para no hacerlo. 
Cuando realmente nos apetece hacer algo, no le preguntamos a nadie, ¡Somos pura emoción!!! Por cierto, no estaría de más preguntar alguna vez, antes de que sea demasiado tarde… DESAFÍOS 
Tenemos desafíos de identidad, de quién creemos que somos y quién queremos ser y también relacionados con el ego, que se suele manifestar a través de un deseo consciente o inconsciente de reconocimiento o protagonismo. 
Ese deseo de ser famoso es para reafirmarnos que existimos, que somos “alguien”. 
Como somos nuevos y estamos cambiando continuamente, necesitamos esa constante afirmación de existencia, necesitamos ser famosos a menudo. Siendo práctico, parece que ser famoso dependa de la cantidad de gente que te conoce, así que ¿cuánta gente debe conocerte para que te sientas famoso? 
No, claro, la solución no pasa por ahí, sino por darse cuenta de que eres más que famoso, eres único; cuando aceptas eso, ya no sientes la necesidad de destacar. 
Un paso en nuestra evolución es quitarle importancia a la pregunta “quién soy”, aceptando definitivamente nuestra existencia y enfocándonos en “para qué estoy aquí en este momento”. 
También se nos presenta como un desafío el saber cuándo hemos ido lo bastante lejos y es un buen momento para detenernos. 
Debemos aprender a pararnos porque queremos ir muy deprisa para destacar, movidos por el deseo de separarnos de la Unidad de donde venimos. 
Ese afán de ir hacia delante, nos lleva por fin a retrasarnos. 
No hace falta ir tan rápido porque nos pasamos y entonces no queda más remedio que volver y eso nos cuesta bastante. 
Otro de nuestros desafíos es explorar la soledad; lo haremos por nuestra propia elección o porque parece que nos dejan solos. 
Más claro, si no exploramos la soledad por nuestra voluntad, nos van a dejar: entonces, a pesar de nuestra resistencia, es cuando no tenemos más remedio que explorarla por nuestra cuenta. 
Ganar y perder nos afecta mucho, pero generalmente por lo que pensarán los demás y no porque nos importe realmente tanto. No hemos venido a tratar asuntos económicos y eso no nos va a hacer perder generalmente mucho tiempo. 
Hemos nacido con estrella en ese campo y las cosas siempre se arreglan de alguna manera. Esto, a veces, ocurre de forma inesperada y afortunada, aunque a nosotros, por puro protagonismo, nos gusta pensar que fuimos quien lo arregló. Nos relacionamos mucho mejor con nuestros sentimientos que con nuestros procesos racionales o mentales. 
El debate entre corazón y mente se inicia cuando nos parece que el hecho de que algo nos encante, no es suficiente para hacerlo y buscamos razones, motivos para justificárnoslo a nosotros mismos y a los demás. 
Llegamos a confundirnos cuando pensamos demasiado, cuando le damos demasiadas vueltas a algo. 
Si ese proceso se intensifica, podemos sentir miedo, responder con agresividad, o quedarnos paralizados. 
En el mejor de los casos nos pondremos bastante pesados. 
Las cosas nos van mucho mejor cuando seguimos los impulsos del corazón y la única razón que necesitamos para hacer algo es que disfrutamos haciéndolo. 
Cualquier cosa que hagamos puede ser rentable, ya que toda actividad aporta un beneficio y alguien que se puede ganar la vida a través de ella. Así que lo importante es que disfrutemos haciendo, entonces los aspectos económicos se cuidan solos. 
Si atiendes las cualidades de vida, las cantidades se cuidan solas. 
Es importante para cualquier persona, pero imprescindible para nosotros en esta etapa, dedicar diariamente un tiempo al arte. Si no tenemos claro cuál es nuestro arte, deberíamos dedicar ese tiempo a descubrirlo. 
Puede ser bailar, cantar, escribir, tocar algún instrumento, pintar, bordar, escultura, artesanía, teatro, algún deporte; algún espacio donde poder canalizar nuestra energía y dirigir nuestros impulsos. 
Si no tenemos un arte, no es que nos falte algo, es que nos falta mucho. En la introducción decíamos que el mundo externo tiene más realidad como la metáfora que representa, que como hecho físico. Ésta es una parte que nos puede costar entender, porque nuestra vida empieza con un enfoque muy externo y aceptar que el mundo exterior no tiene tanta importancia, nos cuesta. Decir que el mundo externo tiene más realidad como metáfora, tiene una repercusión directa en cómo nos vemos a nosotros, porque si el mundo es sólo una ilusión, entonces el “yo” tampoco existe, y no nos gusta pensar en esa posibilidad. También tiene una repercusión en como vemos al “otro”, el que está delante nuestro y nos hace de espejo; el “otro” forma parte del mundo que creamos a través de nuestras creencias y está reflejando una parte nuestra en el momento en que lo miramos. Eso también nos costará y todavía más, si lo que nos enseña es una parte nuestra que no queremos ver; es importante acordarnos que ese aspecto que no nos gusta, representa una resistencia que cuando se transforme nos aportará un gran regalo. 
En la primera parte de nuestra vida tendemos a depender de la opinión de los demás, nos sentimos realizados actuando para el otro, alguien que no es yo. 
Pensar que el otro es sólo una metáfora, parece que le quita parte de la gracia. 
No es fácil de aceptar sin haberlo experimentado, que el mundo interior tenga más realidad que el exterior; acordarnos de ello de vez en cuando, nos puede ayudar a no caer en la trampa del ego, del qué dirán y qué pensarán. 
Nos gusta quejarnos, pero no para compadecernos de nosotros mismos, sino para que el otro vea lo buenos que somos y lo bien que lo hicimos: “esto es lo que “YO” hice y mira lo que me pasó…!”. 
No escuchamos demasiado a los demás, porque nuestro ego se siente débil cuando el otro explica algo que no nos gusta y no lo podemos o sabemos rebatir: entonces el ego no quiere escuchar. A los 1 no nos gusta la idea de que el otro nos convenza, nuestro ego no nos lo permite en muchos casos y lo de menos es si tenemos, o no, razón. 
NIÑEZ 
En general el 1 tiene un nacimiento extremo, es muy lento o muy rápido. Suele venir unos días adelantado o atrasado. Cuando viene adelantado es porque quiere salir ya y cuando viene retrasado es porque ya está resistiendo su camino. 
Tiene dificultades para comer, mejor dicho, las tienen sus padres para que coma. 
No come, come lento y mal, o la comida le da igual. 
El 1 ya se siente muy alimentado, porque viene de una conexión directa con la Totalidad, así que está lleno en todos los sentidos. Cuando uno tiene su alma alimentada, tiene menos hambre; el 1 viene con su alma llena. Es mimado por uno o los dos padres; se le suele permitir todo. 
Es un niño activo, puede ser muy lanzado pero también irse al otro extremo y ser muy tímido. Se produce una circunstancia, generalmente entre los 8 y 10 años, a veces antes, donde el niño se siente que está por su cuenta. 
Es como si su vida empezara estando acostado y tuviera que ponerse de pie para empezar a funcionar en el mundo. 
Ese “quedarse solo” simboliza la acción de ponerse de pie. Quizá se queda con abuelos, tíos, hermanos o con otras personas, pero él tiene la sensación de estar por su cuenta. 
Este estar por su cuenta, tiene también el aspecto de vivir la soledad. 
El 1 siempre es niño, un niño eterno. Nunca se hace mayor aunque debe aprender a jugar a ser mayor y se lo puede tomar muy en serio, pero siempre tendrá la inocencia, ingenuidad, ilusión y el impulso de un niño. 
En estos aspectos parece que nunca madura. 
En clase va a destacar de una u otra forma, será el primero o el último, va a llamar la atención de alguna manera. 
Está muy condicionado por la opinión de los demás, por cómo le ven los otros. Su ego es muy sensible y se le hiere con facilidad. 
Como se siente herido, después tiene la necesidad de vengarse, pero no porque sea vengativo, sino para restablecer o fortalecer su imagen. 
Al 1 le encanta jugar a hacer de mamá, y todo lo relacionado con proteger el mundo. 
PROFESIÓN 
Pueden ser artistas en cualquier género o actores aunque no necesariamente por su técnica o profesionalidad, sino por su carisma, que les convertiría en estrellas más que actores. 
Esta faceta artística se puede desarrollar en cualquier campo como podría ser pintura o escultura. 
Pueden ser excelentes vendedores porque en su papel de actores pueden vender cualquier cosa. 
No importa tanto a lo que se dediquen mientras sea algo nuevo, porque la novedad les atrae. 
En cualquier campo en el que estén van a encontrarse a gusto si destacan por alguna de sus habilidades, son protagonistas. Cuanta mayor sea la relación con la parte artística o creativa y menor con la racional o científica, mejor, aunque pueden destacar como investigadores o inventores. 
Como empleados pueden causar o tener problemas por su impulsividad y por querer tener el protagonismo del grupo. Tienen predisposición a liderar cualquier situación por su impulso, iniciativa y rápida toma de decisiones. 
Esto los puede hacer buenos jefes, aunque también son demasiado arriesgados y poco constantes, cualidades que no encajan si se encuentran en una empresa conservadora. SALUD 
Pueden tener problemas de ojos porque éstos se relacionan con el ego, cómo se ven a ellos mismos y cómo creen que les ven los demás. También se pueden encontrar con problemas de corazón y estómago: 
Los que padecen del corazón estarían más enfocados en las emociones a través de “si me quieren o no me quieren” y los que sufren del estómago serían los más calculadores en términos de ganar y perder, juzgando y dividiendo las emociones en positivas/negativas y rechazando las segundas. Les gusta sentir y, para ellos, la parte positiva de la enfermedad es que les permite sentir, aunque sea dolor o molestias. 
Está claro que eso es una confusión, porque sufrir no es la mejor forma de sentir, o manifiesta la necesidad de sentir a un nivel más íntimo. Todo en la vida tiene un principio de placer. Lo que llamamos la evolución es una búsqueda de placer, pero no un placer lujurioso, sino un placer mucho más profundo, un sentirse bien consigo mismo, el placer de sentir la vida dentro de ti. 
RELACIONES 
Los números que se relacionan mejor con el 1 son el 2, 8, 9 y 3. Las relaciones con 2, 8 y 9 apoyan especialmente al 1; éste puede notar que entre las personas que le han apoyado de forma clave, van a aparecer “casualmente” el 8 el 2 y el 9. 
Las relaciones entre 1 y 8 funcionan muy bien si el 8 le da el espacio o la libertad al 1 y éste no se siente presionado. 
Con el 2 se siente muy apoyado, el 2 le hace casi de mamá. 
El 9 le da un sentido universal al 1, el 1 y el 9 suman 10 y el cero le da una dimensión espiritual. 
El 3 y 1 se apoyan mucho a nivel creativo pero la convivencia puede ser difícil. 
RECORDAR 
Nuestro camino es… De inocencia, corazón, impulso, emoción, creación, arte, de hacer cosas por cuenta propia, independiente y de ser uno mismo. Una clave es… El empezar, como el sembrar es un proceso completo, así que no hace falta terminar todo lo que empezamos.
http://elnuevodespertardelser.blogspot.com.es/ 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...